Comentamos de manera rápida y comprensible para todos los públicos, los rasgos característicos de los aceites esenciales, vegetales e hidrolatos. Así como sus principales diferencias y máximos exponentes.
¿Qué son los Aceites Esenciales?
Son aceites naturales que concentran sustancias características de cada planta, son el resultado de la extracción por destilación al vapor o expresión. Debido a su altísima concentración, la mayoría deben usarse diluidos en aceites portadores (vegetales), para su uso tópico, o en agua para su uso en aromaterapia.
Algunos de los aceites esenciales más conocidos son: Abeto siberiano,Ajedrea,Albahaca,Anís,Azahar,Árbolde Té, Bergamota, Canela, Cedro, Ciprés, Citronela,Clavo, Espliego, Eucalipto, Gaulteria, Geranio, Hinojo dulce, Incienso, Lavanda, Lavandín, Lemongrass, Limón, Litsea, Mandarina, Manzanilla, Menta, Mejorana española, Mejorana dulce, Mirra, Orégano, Pachuli, Palmarosa, Pomelo, Romero, Tomillo, Vetiver, Ylang Ylang y Zanahoria.
¿Qué son los aceites portadores o base?
Este tipo de aceites también son conocidos como aceites de arrastre. Son
aceites vegetales naturales no concentrados, que servirán para poder diluir en ellos los aceites esenciales, de modo que puedan ser aplicados de forma cómoda y segura, ya que pueden aplicarse directamente a la piel sin problemas. Suelen ser muy buenos hidratantes. Su mejor versión es la
primera presión en frío, de extracción mediante procedimientos mecánicos, de modo que el aceite conserva todas sus propiedades, pues no ha sido refinado, ni mezclado, ni calentado, procesos que merman su calidad y principios activos.
Los aceites vegetales de primera presión en frío más usados son: Aguacate, Albaricoque, Almendra dulce,Argán,Avellana,Cáñamo,Coco,Comino,Germen de trigo, Jojoba, Macadamia, Karité, Onagra, Pepita de Uva, Rosa de mosqueta y Sésamo.
¿Cómo diferenciar el Aceite Esencial del Aceite vegetal o portador?
Una de las diferencias que se comprueba a simple vista es que un aceite esencial es generalmente mucho más líquido que un aceite vegetal. Esto se debe a que los aceites vegetales o portadores son muy ricos en ácidos grasos (los más conocidos el omega 3 y omega 6), lo que les da un aspecto oleoso. En cambio, los aceites esenciales son concentrados de plantas y sus sustancias son volátiles, de ahí su fuerte aroma. Pero no sólo no comparten aspecto, sino que existen más diferencias entre estos aceites respecto a su modo de obtención, su uso y sus propiedades:
- El método de extracción de los aceites: ambos son obtenidos de diversas partes de las plantas, como flores, tallos, bulbos, raíces y hojas, pero los aceites vegetales se pueden extraer por presión fría o caliente, lo que varía las proporciones de nutrientes, mientras que los aceites esenciales se consiguen por prensado o destilación al vapor.
- Propiedades naturales de los aceites: los aceites vegetales destacan por sus propiedades hidratantes y protectoras de la piel. Además, facilita la penetración de las propiedades de las plantas con las maceraciones. Por su parte, los aceites esenciales destacan por sus beneficios en los remedios naturales y los tratamientos terapéuticos.
- Formas de uso de los aceites: ambos se pueden usar por vía tópica, pero los aceites vegetales se pueden usar puros sobre la piel o como alimento, como el aceite de oliva, por ejemplo. En cambio, los aceites esenciales no se pueden consumir oralmente y para su uso sobre la piel deben estar diluidos, bien en aceites vegetales o bien en otros ingredientes naturales como leche, mantecas, miel… pero nunca con agua. No obstante, los aceites esenciales sí se pueden usar en aromaterapia mediante inhalación ambiental.
- Riesgo y contraindicaciones de los aceites: los aceites vegetales no presentan ningún riesgo de intoxicación ni suelen estar contraindicados en ningún caso. Por el contrario, existen aceites esenciales contraindicados en algunos casos, ya porque sean aceites fotosensibles, tóxicos o irritantes.
¿Qué son los hidrolatos o aguas florales naturales?
Los hidrolatos son el resultado de la decantación del agua empleada en el proceso de extracción de los aceites esenciales. Mantienen las propiedades de los aceites esenciales, aunque en una muy baja intensidad, dada su baja concentración, lo que los hace ideales para elaborar tónicos o fragancias para aplicar directamente sobre la piel.
En próximas entradas del blog profundizaremos en cada una de las tipologías, así como en las propiedades de cada uno de los aceites esenciales, vegetales e hidrolatos.